Parece que Navarra sigue dando sorpresas agradables con las ratas de agua. Estos días he pasado varias veces por tierras navarras, y ahora se mira con otros ojos a las zonas de carrizos y juncos. La primera colonia localizada está próxima al municipio de Cárcar, en el límite con Andosilla. Se trata de un pequeño arroyo junto con un camino con presencia de carrizos, zarzas, y ejemplares aislados de tamarices. Está rodeada de áreas agrícolas de secano (cereal, almendros) y una repoblación de pino carrasco. Parece una colonia de reducida extensión, pero aparecían los indicios típicos con excrementos, sendas, hierba cortada en bisel y entradas a galerías. También había rastros de conejo. Una pena que había un perro muerto encima del carrizo, y olía regular.
miércoles, 11 de mayo de 2011
Espectacular Navarra
por Eugenio Montelío
Parece que Navarra sigue dando sorpresas agradables con las ratas de agua. Estos días he pasado varias veces por tierras navarras, y ahora se mira con otros ojos a las zonas de carrizos y juncos. La primera colonia localizada está próxima al municipio de Cárcar, en el límite con Andosilla. Se trata de un pequeño arroyo junto con un camino con presencia de carrizos, zarzas, y ejemplares aislados de tamarices. Está rodeada de áreas agrícolas de secano (cereal, almendros) y una repoblación de pino carrasco. Parece una colonia de reducida extensión, pero aparecían los indicios típicos con excrementos, sendas, hierba cortada en bisel y entradas a galerías. También había rastros de conejo. Una pena que había un perro muerto encima del carrizo, y olía regular.
La segunda colonia se encuentra en Viana. En este caso se trata también de un arroyo, pero la presencia y continuidad de helófitos es más elevada. Predominan también áreas agrícolas de secano (cereal, viñedo). Se trata de un barranco salino con juncos, carrizos, Suaeda, y ejemplares aislados de tamarices. Encontré indicios en un mínimo de 700 metros a lo largo del arroyo. En las fotos se puede ver un detalle de algunos de ellos, pero la densidad de indicios era impresionante. Lástima que no se encuentren dentro de las cuadrículas a muestrear.
Parece que Navarra sigue dando sorpresas agradables con las ratas de agua. Estos días he pasado varias veces por tierras navarras, y ahora se mira con otros ojos a las zonas de carrizos y juncos. La primera colonia localizada está próxima al municipio de Cárcar, en el límite con Andosilla. Se trata de un pequeño arroyo junto con un camino con presencia de carrizos, zarzas, y ejemplares aislados de tamarices. Está rodeada de áreas agrícolas de secano (cereal, almendros) y una repoblación de pino carrasco. Parece una colonia de reducida extensión, pero aparecían los indicios típicos con excrementos, sendas, hierba cortada en bisel y entradas a galerías. También había rastros de conejo. Una pena que había un perro muerto encima del carrizo, y olía regular.
Etiquetas: Arvicola sapidus
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